Hoy
en The garden of your dreams, hablaremos de los cuidados y el
mantenimiento que debemos realizar y como hacerlo para que la calidad
y salud de tus plantas sean las adecuadas.
Hablaremos
también de la fertilización y el abonado que debemos realizar y
cada cuanto tiempo debe hacerse para que tus plantas mantengan el
vigor y la calidad que le permitirá crecer y desarrollarse de la
mejor manera.
Lo
primero y fundamental que debemos realizar es reconocer el espacio de
nuestras áreas verdes, de esta manera sabremos el delimitado y
ubicación de las diferentes plantas que queremos colocar o en todo
caso también re ubicar por una mala ubicación de las mismas.
Debemos
reconocer su crecimiento de adulta para de esta manera delimitar el
área que ocupara, ya que sino lo tenemos en cuenta a este detalle,
provocará con el tiempo el ahogamiento con las otras plantas, mala
circulación del aire y por consiguiente una vista poco agradable y
contemplativo.
Cada
planta requiere de cuidados especiales, lo ideal y siempre muy
hablado aquí en nuestros post, es la utilización de plantas
autóctonas sobre todo el regiones donde el clima sea extremo, ya que
en esos climas este tipo de plantas son las que mejor se adaptan.
A
la hora de elegir nuestras plantas debemos tener en claro los
sectores que necesitamos cubrir y tener en cuenta determinadas
consideraciones ya sea de las distintas ubicaciones que deben tener
(sombra,semisombra, con claridad y sol directo), como por ejemplo
también si será para un lugar muy abierto donde las correntadas de
aire pudieran deshidratarlas.
Las
plantas mal ubicadas favorecen el no correcto crecimiento, la
aparición de enfermedades y por consiguiente su debilitamiento y
muerte.
Al
comprar las distintas plantas, ya sean herbáceas, gramíneas,
helechos, arbustos, trepadoras, césped y o árboles, debemos escoger
aquellos que consideremos que estén fuertes y sanos. Si es posible
tener un centro de jardinería (vivero) de confianza, donde nos
brinden una buena salud de las plantas,consejos útiles que nos
asegure un buen porcentaje de durabilidad de las mismas.
A
la hora de preparar el lugar elegido para cada planta, es importante
renovar la tierra vieja añadiendo una buena capa de sustrato nuevo,
junto con un abono y fertilizante, brindando los nutrientes que
requieren las plantas, al hacer esta acción sirve y mucho porque al
remover la tierra, estamos al mismo tiempo ablandando la tierra para
favorecer el enraizamiento. Junto con esta mejora ayudamos a la
fertilidad del suelo que brinda una fijación de las raíces, absorbe
y retiene mejor el agua, por otro lado la tierra esta aireada, es
decir permite la circulación del aire, lo cual ayuda a que las
raíces puedan enraizar y desarrollarse.
El
abonado y la fertilización puede hacerse de tres maneras, añadiendo
al terreno abono verde dejando que crezca sin utilizar el suelo, ya
sea para plantas o huerta. El abono verde aporta nutrientes y mejora
la estructura de la tierra entre muchas mejoras (en nuestra página
hay un post dedicado al abono verde).
La
demora de la fertilidad del suelo dependerá de la escasez de
recursos que le falte al suelo, puede ser de tres meses hasta un año.
Otra
manera es agregar composta vegetal antes del plantado, lo cual le
aportará al suelo NPK, que es el acrónimo de los elementos químicos
esenciales para el suelo como el Nitrógeno, Potasio y Fósforo.
Otra
manera es la utilización de fertilizantes químicos, ya sean
granulados o líquidos, los primeros, el efecto es duradero y a
medida que se riega lo va fijando al suelo, aunque lo ideal es
agregarle cuando no llueva o tener en cuenta que luego de cada lluvia
deberíamos repetir la operación.
Los
fertilizantes líquidos, tienen un efecto mas corto, y hay que
repetir mas seguido, su acción es rápida y corta.
Si
alguna de tus plantas se ve afectada o enferma, es hora de actuar, lo
primero es quitar las hojas afectadas y por consiguiente reconocer el
problema de salud, ya sea por una incorrecta ubicación de la misma,
un deficiente riego o falta de nutrientes o también puede darse por
una mala poda, donde las malas heridas causan enfermedades o
aparición de hongos por el debilitamiento que causan.
En
árboles o arbustos, las podas deben hacerse cuando correspondan,
salvo pequeños cortes en las podas de mantenimiento.
Debemos
saber que las plantas se comunican con nosotros por medio de su
estado, es la manera que ellas tienen de decirnos si están siendo
afectadas por algún problema o al verlas vigorosas nos están
diciendo que se encuentran perfectas de salud.
El
riego muchas veces suele ser incorrecto, a la hora de diseñar el
jardín, debemos ubicar plantas que compartan los mismos recursos
hídricos. Cuando hacemos un arreglo floral vivo, como puede ser un
cantero de plantas, o una maceta con algún arbusto predominante,
rodeada de plantas herbáceas, y rastreras, debemos ubicar y agrupar
plantas por el mismo consumo de agua, ya que si colocamos una planta
de bajo consumo hídrico con otra que si lo necesite, una u otra
según nuestra acción, las plantas se verán afectadas.
Las
plantas en suelo desarrollan sus raíces mas fuertes y suelen ser
mucho mas productivas y capaces de tolerar determinadas causas como
por ejemplo las horas de sol que recibe, en muchas regiones si bien
hay plantas que son de sol directo, los veranos suelen ser muy
calurosos y también puede no recibir demasiada ventilación por lo
que pudiera verse afectada y quemarse. En estos tipos de lugares
donde las plantas sufren los calores extremos, no es mala idea
colocar los llamados “tuneles” que permite no darle el sol
durante las horas del mediodía por ejemplo. Las plantas en maceta o
en algún otro material no profundo, donde la planta se viera
limitada, como puede ser alguna clase de arreglo floral, ya que en su
mayoría estas, en estos tipos de ubicaciones no suelen o pueden
desarrollar sus raíces, aunque por eso, la recomendación ideal
sería quitarlas del sol en las horas de mayor calor.
Con
este post esperamos poder ayudarte a la hora de mantener y cuidar tu
jardín como también has visto, algunas recomendaciones validas a la
hora de elegir tus plantas.
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