Si estamos en el hemisferio norte podemos seguir estas pautas y si estamos en el hemisferio sur, deberiamos obervar las tareas de los meses de junio/julio dependiendo la región como sería enero en el hemisferio norte.
En enero dependiendo de la región donde vivamos y llegara a nevar y el césped este cubierto, no debemos juntar la nieve en un punto, ya que podríamos ahogar el césped.
Tendremos que rastrillar la hierba (pasto) eliminando y quitando hojas secas para evitar la aparición de hongos y enfermedades.
Ya en febrero una vez finalizada las nevadas o el frío bien intenso, es importante la distribución de un fertilizante o azufre en polvo mezclada con arena o no a gusto, ya que es bueno porque aumenta su resistencia a enfermedades. También podremos observar el nivel del suelo y su drenaje para intentar mejorarlo.
En el mes de marzo debemos airear el césped pinchando el suelo con un horcón y extender después un abono completo para favorecer el crecimiento de la hierba.
Si ha habido un buen tiempo, la primera poda del césped ya podrá realizarse a finales de este mes (lo sabremos fácilmente cuando veamos cómo ha crecido).
Ya podemos sembrar césped nuevo (si hiciera falta) pero es un buen momento para realizarlo.
Es recomendable elegir las semillas más adecuadas al clima de la región y tener también en cuenta para ello el uso que le daremos al césped.
El césped consume
una gran cantidad de nutrientes debido a que está sometido a siegas y pisoteo constantes
que obligan a que deban regenerarse constantemente emitiendo nuevos tallos, nuevas hojas y nuevas raíces.
Podemos reducir las necesidad de nutrientes del césped sembrando un césped de bajo mantenimiento,
formado por especies de crecimiento lento que permitan siegas menos
frecuentes y recortes menos fuertes.
En primer lugar segaremos el césped. También podemos aprovechar para realizar el escarificado y el aireado. Dos días después de la siega, aplicamos compost repartiéndolo de forma uniforme a lo largo del césped.
Como complemento a los abonados de
primavera, verano u otoño, podemos realizar abonados regulares después
de cada siega esparciendo sobre el césped los restos de siega secos y
bien triturados.
Los abonados debemos realizarlos a principio de la primavera, dependiendo de la exigencia del cesped, se hará un segundo a principios del verano.
El abonado de primavera y verano
utilizaremos un compost que sea rico en nitrógeno y así estimule el crecimiento y
la densidad.
En el mes de abril, sigue siendo bueno para sembrar cesped, si es que no se hizo en el mes anterior. dependiendo de la importancia del suelo, su demora hiciera falta la utilizacion de tepes (cesped con tierra enrollada) ya haré un post dedicada especialmente a este caso la utilizacion de cesped nuevo si bien se puede colocar durante todo el año, conlleva a preparar el terreno obviamente antes de su colocación, por eso habrá que preveer este punto, ya que los tepes conviene una vez comprado no acumularlo y si colocarlo ese mismo dia o a lo sumo al dia siguiente, ya que amarillean y sus raices comienzan a resecarse.
Siempre después de una siembra y abonado o asi mismo usaramos cesped nuevo (tepe) es importante el riego, evitando las horas de mas calor, durante la mañana y luego de la puesta del sol son buenas horas para regar.
En mayo el cesped debe ser regado a menudo lo mismo que comienzan los cortes con frecuencia, debemos observar el crecimiento y retirada de malas hierbas a mano o selectivamente con algun producto si hiciera falta.
En el mes de junio deberemos repetir la fertilización que comenzamos en marzo antes que llegue el verdadero calor.
Los riegos deben ser frecuentes y abundantes sin encharcar obviamente y sera necesario cortar la hierba una vez por semana.
Los meses de julio y agosto con las altas temperaturas y dias de mas de 35º o mas, el cesped comienza una fase de reposo en el césped,
una pérdida de color y una reducción de su desarrollo, por lo que
tendremos que cortarlo con menos frecuencia. Aún así, habrá que seguir
regándolo diariamente y de forma abundante.
Es oportuno la aplicación un fertilizante abonado. Debemos estar atentos por si aparecen malas hierbas para arrancarlas manualmente en cuanto aparezcan.
Una vez finalizado el verano en septiembre y con temperaturas más suaves y lluvias de esta
época (junto con la humedad que esto conlleva) favorece a la renovación
del césped.
Es bueno seguir aplicando un fertilizante a base de nitrógeno y hierro cada 15 días para conservar una buena coloración de la hierba.
Los ultimos dias del mes de octubre y comienzos de noviembre, efectuaremos el último corte del año.Tambien debemos airear el césped (utilizando un horcón) y después de esto aplicar un abono completo.
En el mes de diciembre es necesario eliminar todas las hojas secas del césped para prevenir la aparición de hongos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario